miércoles, 18 de junio de 2008

LYON ET LA PLUIE

Por fin la incógnita se solucionó. La noche del domingo y lunes dormimos en Lyon y pasamos en la 2ª ciudad de Francia los 2 días, no sin algo de intriga antes.
La noche del viernes todo quedó en esperemos a mañana a ver si los vuelos bajan y puedes ir mirando hotel. ES TRANQUILO, TRANQUILO.
Pero resulta que Johannes trabajaba todo el día y hasta las 12 y pico de la noche no llegaba a casa y no se le podía localizar.
Así que mire los vuelos y no habían bajado. ¿Qué hago? ¿Busco hotel?
Así que me voy a trabajar y en consenso con mis compañeras decido buscar hotel en Lyon, ya que el vuelo salía a las 7 de la mañana y a la 1 de la madrugada no era cuestión de buscar hotel.
Al final todo salió estupendo. El hotel, sin ser un 5 estrellas, estaba en pleno centro, limpio, precio asequible y bien. El resto de alojamientos se subía al doble.
Saco un poco de información de la ciudad y a la aventura.
Por toda esa planificación mi amorcito dice que debo tener alguna bisabuela alemana porque me gusta llevarlo todo planificado.
Resulta ser una ciudad cuyo casco histórico está rodeado por 2 ríos, el Ródano y el Saône y está llena de puentes.
Este casco histórico es precioso, desde el Vieux Lyon, a Fourvière, pasando por la Croix Rousse y la Presqu`ile.
Pasadizos, calles estrechas, casas renacentista, bares y restaurantes al estilo Trastevere con terrazas, vestigios romanos, iglesias como la catedral de St-Jean o la preciosa Notre Dame de Fourvière que está en lo alto de una colina y protege la ciudad.
El centro es pequeño y se ve bien andando. Todo muy romántico. Y con 2-3 días es suficiente.
La única pega es la lluvia incesante que nos acompañó los 2 días, aunque para él siempre estaba a punto de salir el sol aunque no lo viéramos hasta llegar al aeropuerto de vuelta. SIEMPRE POSITIVO
Y su conclusión es que como yo soy negativo, su positividad tendría que ser doble para que saliera el sol.
¡AH! Al ser alemán se debe expresar mal, lo que él llama negativo, yo lo llamo realidad, o sea, un cielo negro como el alquitrán y lluvia, lluvia y más lluvia.
Según nos han dicho en 5 semanas ha salido 2 días el sol, así están todos los escaparates llenos de ropa y zapatos veraniegos que no compra ni el tato.
El aeropuerto Saint Exupery no me gustó nada. Esta a 25 kms con un acceso solamente por bus, el cual atraviesa toda la ciudad con sus correspondientes atascos, por lo que Johannes estuvo a punto de perder el vuelo, a eso hay que unir que él es tranquilo y siempre positivo(en esto soy yo más alemán y cuadriculado que él)

Para colmo está todo en obras, mal indicado dentro de él y el ingles que hablan los que allí trabajan es muy parecido al mío, o sea, rural total, por supuesto ni pensar que hablen español.
En definitiva, un finde romántico, tranquilo, comiendo bien, paseando, relajados y en compañía mutua que tan bien nos vino, además de conocer un sitio nuevo.
La Piquer sigue paseando el baúl o mejor dicho, la maleta del outlet de Salvador Bachiller, por el mundo.

JUAN

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Juan veo que al menos has aprendido a decir lluvia en francés, no si al final vas a ser políglota.
En fin que me alegro que lo hayas pasado bien.
Besos.
MdM

Anónimo dijo...

Es que con tanto viaje, no sé ya ni en que hablar.
Algo se me tendrá que ir pegando de cada sitio. JA,JA

JUAN