Es la única playa del parque natural Cabo de Gata-Níjar que está situada fuera de los términos municipales de Almería y Níjar.
Se llega fácil al aparcamiento, desde Carboneras donde hay un cartel que lo indica. Una vez en el aparcamiento se puede ver la playa desde el mirador a lo lejos con una vista impactante. Para llegar a la playa hay que andar unos 20-30 minutos con
Una vez allí la playa es amplia tanto en longitud(1160 metros) como en anchura(30 metros) y rodeada de rocas volcánicas que le dan un precioso aspecto.
Es espectacular por su arena blanca, sin embargo al llegar a la orilla hay guijarros rodados poco molestos y unas aguas cristalinas con una azul turquesa impresionante que hace que puedas ver el fondo del mar y hasta tus propios pies. Una piscina en medio del mediterráneo.
La playa es profunda y con aguas bastante gélidas, quizás por las corrientes, con las que hay que tener mucho cuidado en días en que la mar está revuelta o días de aire.
De las corrientes parece ser que viene su nombre aunque no está claro. Se dice que dichas corrientes arrastraban cadáveres caídos al mar en épocas de luchas marítimas, valientes navegantes, naufragios, piratas, comerciantes...
Recientemente ha sido proclamada Reserva de la Biosfera y elegida por los lectores del diario 20 minutos como mejor playa de España.
Al final hay una roca que separa una zona donde se suelen hacer nudismo aunque lo puedes hacer en cualquier lado de la playa sin sentirte observado.
Solo un pero, desde la playa, mirando hacia la izquierda, se divisa la central térmica de Carboneras, que nos da que pensar como puede estar allí estropeando todo ese mazacote de cemento, pero a la vez piensas como se puede tener esas aguas tan espectaculares. Sin embargo si miras hacia la derecha ves la magia de la naturaleza.
En definitiva, una mezcla de colores, el azul del mar, el blanco de sus arenas, el negro de las abruptas rocas que la rodea. Un oasis virgen de paz y tranquilidad.
BESOS, JUAN